viernes, 19 de diciembre de 2008

Hábitos nutritivos

La época de la adolescencia es crítica en el proceso de crecimiento y por eso alimentarse adecuadamente es muy importante. Resulta evidente que un proceso que se repite varias veces al día, durante toda la vida, puede llegar a tener una repercusión sobre la salud y el bienestar tanto beneficioso como perjudicial, especialmente en el caso de que se perpetúen hábitos inadecuados.
Para alimentarse bien es importante conocer cuáles son los alimentos básicos y sus propiedades, y en qué proporciones es adecuado que los tomes, sin olvidar tus preferencias y la satisfacción de comer a gusto.
Por otra parte, es necesario tener en cuenta que comer no es sólo un proceso de incorporación de sustancias al organismo para que éste funcione.
El acto de comer responde principalmente a tres demandas:
1. Fisiológica: función básica de mantenimiento, es decir, el aporte de sustancias y combustible para que el organismo funcione.
2. Psicológica: corresponde al componente más afectivo y emocional de la alimentación (placer, preferencias, aversiones...).
3. Sociocultural: identificación con un determinado colectivo, cultura, tradición... a través de la alimentación.
Aunque el acto de comer es voluntario (comes cuando tienes apetito, y generalmente seleccionas el tipo de alimentos que deseas tomar) es importante tener en cuenta que está influido por múltiples factores como son: la disponibilidad de alimentos de tu entorno, la información que tienes sobre los alimentos, las pautas alimentarias de tu núcleo familiar y del ámbito en el que te mueves, la publicidad alimentaria, modas y nuevas tendencias, aspectos económicos, religiosos...

Alimentos basicos
Los alimentos suelen clasificarse en grupos o familias, en base a su origen (animal o vegetal), a su función en el organismo, a su contenido en nutrientes, etc. A continuación os presentamos una clasificación de los alimentos en forma de pirámide que es de las más aceptadas en la educación alimentaria.
La pirámide muestra los grupos de alimentos que pueden considerarse básicos. Es conveniente ingerir a diario alimentos de estos seis grupos para conseguir un adecuado equilibrio en la alimentación. Por otro lado existe una serie de alimentos y bebidas, que no se consideran básicos, por lo que se incluyen sólo en la punta de la pirámide, como son el azúcar, la sal, los productos azucarados, las bebidas refrescantes, estimulantes, la bollería y la pastelería. En una alimentación equilibrada podría prescindirse perfectamente de estos alimentos aunque, en realidad, lo que se recomienda es moderación en cuanto a su consumo.
Además de todos estos alimentos, no hay que olvidar que el agua también es imprescindible si se desea mantener una alimentación correcta.

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